¿Debería contar con instructores internos en mi centro de trabajo?

Pensar en un agente capacitador o instructor, no queda limitado solo a organismos o personas que no forman parte de mi centro de trabajo como entidades educativas, centros de capacitación o profesionales independientes. También se puede considerar como un mecanismo interno de desarrollo del personal contar con una o varias personas formadas como instructores internos.

¿Cuándo es pertinente contar con ese puesto o desempeño dentro de mi organización?

Primeramente, aclaremos a qué nos referimos entre “puesto” y “desempeño”. Cuando hablamos de “puesto”, significa contar con una o varias personas dedicadas en su totalidad, específicamente o de forma prioritaria como instructor interno. El decir “desempeño”, consiste en que el trabajador tiene su puesto de trabajo al modelo productivo de la organización diferente a ser instructor; no obstante, ocasionalmente se le requiere para capacitar a otros compañeros

Tomando como criterios el tamaño de la empresa, giro, operaciones y necesidades particulares o exigencias de sus propios clientes, puede llegar a necesitarse una o más personas exclusivas para realizar este rol de forma interna.

Otro criterio resultaría de la necesidad de apoyarse en personal de la propia plantilla por sus conocimientos técnicos específicos, ser nivel de mando u ocuparse de áreas de fortalecimiento o inducción, que serían requeridas con menor frecuencia para enseñar a sus compañeros a través de este desempeño.

¿Qué competencias debe tener y desarrollar?

Deberá contar con los conocimientos y experiencias propios a su campo de especialización (Ventas, Calidad, Compras, Seguridad Laboral, Medio ambiente, Soldadura, Electricidad, Operación de Equipos, etc.) Ser complementadas con el conocimiento de procesos de enseñanza aprendizaje, habilidades de comunicación, estructura de cartas descriptivas, preparación de materiales, elaboración de instrumentos de evaluación y por supuesto el proceso de gestión de la capacitación y adiestramiento.

Sería fundamental integrarlos a un plan de desarrollo para formación de instructores de manera constante.

¿Qué desempeños y actividades realizaría?

Es importante conozca la administración de la capacitación; sin embargo, deberá enfocarse en elaborar la carta descriptiva y materiales de apoyo y soporte para sus cursos, ejecutar la capacitación, dirigir las prácticas, aplicar las evaluaciones pertinentes, retroalimentar a sus participantes y generar reportes de resultados. Apoyándose y comunicándose de forma cercana al área gestora de la capacitación y del departamento involucrado.

¿Cuáles son los beneficios de contar con instructores internos?

Entre los principales resultados favorables de contar con este rol o desempeño en la organización, podemos enlistar: 

• El personal recibirá capacitación de otros compañeros que cuentan con la experiencia y conocimientos específicos al centro de trabajo.
• Disminución de costos al contar con un programa de formación con claridad en la capacitación interna de la externa y solicitando esta última con mayor precisión.
• Contar con personal competente de forma interna para aportar en cumplir con los planes y programas de capacitación obligatorios y periódicos para el centro de trabajo.

La capacitación y adiestramiento representan un plano importante para ser atendido dentro del entorno organizacional. Contar con instructores internos o colaboradores competentes que realicen esta actividad y debidamente dirigidos, permitirá personal calificado y a su vez el logro de beneficios productivos en la entidad.